Estos días
están cargados de vacío. De un vacío que extrañamente parece tener elevados
índices de opacidad.
En estos
tiempos cada viaje y aventura se recuerdan encriptados y difícilmente accesibles.
Una especie de recesión acontece cuando no se recuerdan conocimientos presuntamente
adquiridos.
Por otra
parte, una seguridad en ciertos argumentos propios se hace presente, dudo si motivada
por la credibilidad que me otorgan los otros o si el fenómeno es exactamente
contrario. Supongo que se retroalimentan los hechos.
Terminar
ciertas etapas con sus correspondientes transiciones no iba a pasar desapercibido. Cerrar capítulos parece tarea
compleja en un ambiente de dispersión cuasi-absoluta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario