sábado, 19 de abril de 2014

La irrelevancia del presente

El Presente está vacío, carente de sentido. Hemos robado su esencia apropiándonos del  concepto y asesinándolo con la ayuda de Cotidianeidad, una peligrosa amiga constantemente maltratada.

Pasado y Futuro han encontrado su ansiado protagonismo. Quieren existir, “estar presentes”, hacerse notar, ganar su estatus. Una vez escuché que Presente debía su nombre a su condición de regalo, a su afinidad a la vida -a la natural visión de la vida-; a su esencial realidad. Resulta obvio que es el más real de los tres, el más evidente, pero también el más fugaz y frágil.

1 comentario:

  1. El olvido de lo malo puede ser la chispa adecuada, para el presente, que te proporcione un futuro esperanzador...

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